Ante la aprobación inminente de la enésima reforma educativa, he querido "cortar y pegar" el texto que escribí en el año 2004 con motivo de la aprobación de la LOCE.
¿Réquiem
por de la educación física?
Los sobresalientes y desgraciados
acontecimientos que están convulsionando la actualidad permiten que otras
cuestiones de suma importancia estén pasando desapercibidas; una de ellas la
mal llamada Ley de Calidad de la Enseñanza (LOCE).
Como educador, profesor de
Educación Física, compruebo indignado como uno de los decretos que pretende
desarrollar esta infausta Ley, va a suponer en la práctica la liquidación de una
de las materias mejor valoradas por los estudiantes: la Educación Física, veo como una de las propuestas curriculares de mayor
calado pedagógico, se va a convertir en un residuo educativo; pues se prevé
bajar el horario mínimo de la materia, de dos, a una hora semanal.
Ante este panorama muchos docentes queremos dar
las gracias a la ministra (hoy famoso e hiperactivo ministro) por impedir que los niños y las niñas sean educados en la
adquisición de hábitos de vida saludables y activos; dar las gracias por
estrangular una materia que apuesta por una educación que fomenta la
responsabilidad social e individual. Mil reconocimientos por impedir que a los
chavales se les hable de ellos mismos, se les enseñe a cuidarse y alimentarse,
a ocupar su tiempo de ocio de forma positiva, o a construir una significación
corporal individual y no estigmatizada. En fin señora ministra,
gracias por negar a niñas y niños la oportunidad de ser educados de
forma integral [...].
Los profesores/ras de Educación Física hemos
recibido su mensaje nacional-católico: más sotana y menos chandal, más
dogmatismo en las aulas y menos espíritu abierto y crítico. Hemos entendido que
a ustedes la educación, o no les interesa, o piensan que es algo tan importante
que no puede dejarse en manos de los profesores ¿verdad? [...].
A ese pegote grotesco de despropósitos que
ustedes llaman Ley de Calidad, y lo hacen sin reírse, les sugiero una
iniciativa a modo de absurda guinda: por favor saquen del sistema educativo a todas
esas rancias disciplinas humanísticas sin interés: La Música, Plástica, Educación
Física, la Filosofía, pero no intenten engañar a nadie reduciéndolas al absurdo.
Qué paradoja contemporánea tan lamentable: el
Ministerio de Cultura, Educación y Deportes, se enfrenta a la cultura,
atropella la educación.
Los profesores entendemos que educar consiste en trabajar para transformar las
dificultades en posibilidades, pero: ¿Qué es para la el Ministerio la
educación?"
Desgraciadamente, una vez más, parece que estamos en las mismas...